Por: Maximo Luppino
Hoy evocamos nuestro conjunto de valores, ideas y costumbres que fueron transmitidas de generación en generación, y que conforman la identidad de nuestra nación ARGENTINA.
Desde el sublime AMOR a DIOS, el respeto y veneración por nuestra bandera inmaculada que a todos guarda, hasta el mate compañero de jornada de tantos compatriotas.
La tradición ARGENTINA se forjo a punta de lanza, con coraje y bravura, en los montes y las llanuras, en las cumbres y en los mares. Allí donde un argentino vivió algo de nuestra cultura quedó impregnado para siempre.
Naturales y extranjeros se entrelazaron con un sueño de libertad y progreso, así nuestra patria nació, hecha de a caballo por gauchos valientes fieles a su linajes de hombres decididos.
Aquel que no siente orgullo por el lugar en que nació, por su apellido y por la historia de sus padres y abuelos, mejor estaría sepultado en el olvido, ya que es un cadáver por más que respire.
Recordamos nuestras raíces, abrazamos a nuestros hermanos, somos ARGENTINOS cantando a los vientos la alegría de serlo.
¡VIVA LA PATRIA!
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