PUNTO DE IMPLOSIÓN

Con certeza y alegría podemos afirmar que la oposición en su conjunto es garantía de ORDEN CONSTITUCIONAL. En ningún rincón de la república se trama alterar el orden democrático. La conciencia cívica Argentina evolucionó de tal suerte que es impensada esta atroz posibilidad. Sumamos a esta conciencia despierta al mismísimo sector militar, que desde hace años esta orgánicamente subordinado al rol que le marca la Constitución Nacional.

Una de las pruebas más concretas de esta afirmación fue la ejemplar marcha del 18F, en momento alguno se faltó el respeto a la envestidura presidencial ni a las instituciones de la república.  Todo lo contrario, existe la certeza social que la política en su más alta expresión es la herramienta indiscutida para superar nuestros conflictos.

Con oriental paciencia se aguardan los tiempos electorales, que dicho sea son muy próximos. Ya en agosto se celebrarán las elecciones Primarias Abiertas Simultaneas y Obligatorias, o sea, las PASO.

Dicho más claramente no hay lugar para ningún “golpe de estado”. Mucho menos para un suicida  y demencial AUTO-GOLPE; todas las cartas están echadas sobre la mesa del tiempo y la salida correcta SIEMPRE ES INSTITUCIONAL.

Sólo parece que un diminuto sector oficialista está llegando a su punto de IMPLOSIÓN. Léase el futuro del vicepresidente Amado Boudou y otros severamente señalados por la justicia Argentina y en algunos casos por la ley internacional.

La ARGENTIAN está atenta y expectante por su futuro,   el fanatismo NO ayuda, el rencor destruye al que lo genera. Y la violencia cobra con sangre su propagación. Los pensamientos y acciones son búmeran potenciados que retornan a la mente emisora. Oficialismo y oposición deben cuidar la república, el pueblo ya lo decretó con sus mil voces de sabiduría.

Máximo Luppino

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