El voto en blanco histérico

jueves, 29 de octubre de 2015



Por Alfredo Sayus


En esta instancia de decisión, el FIT (Frente de Izquierda y los Trabajadores) propone como “alternativa” el voto en blanco. Es, sin duda, una actitud por lo menos egoísta por cuanto la instancia de segunda vuelta implica determinar quién deberá gobernar el país por los próximos cuatro años, entre dos candidatos, no entre seis.

No es raro que el FIT (y la izquierda en general) proponga este tipo de posibilidades, pero en realidad sólo se entiende como un voto en blanco histérico u onanista, en el mejor de los casos. Da la sensación que el FIT, habiendo logrado su expectativa de máxima, que era conseguir bancas en el congreso, ahora se desentienda de la situación y “por doctrina partidaria” proponga el voto en blanco.

La misma actitud tomaron la diputada del partido Progresistas, Victoria Donda y el ahora massista Alberto Fernández, quienes ya anunciaron la misma decisión con miras al balotaje. ¿Realmente les interesa el destino de la Argentina al FIT, a Donda y a Fernández? ¿O simplemente, logrados sus objetivos personales, dejan que el pueblo se arregle como pueda?

Una instancia de segunda vuelta significa optar, muchas veces contra los intereses personales, pero sí por la salvaguarda de intereses colectivos que tanto el FIT, como Donda y Fernández parecen estar lejos de representar.

El FIT, que carga sobre sus espaldas el fracaso de no contar con el grueso de los trabajadores argentinos (aunque se autodenominen “… y de los Trabajadores”) no puede soportar que los trabajadores sean peronistas y lanzan un “voto en blanco” ¿contra qué? ¿Contra los representantes del capitalismo? ¿Contra la burguesía nacional? ¿Contra los gerentes del monopolio? Les cuesta aceptar que, en esta instancia decisoria, están más cerca de las políticas del gobierno (y en esta circunstancia, de Scioli) porque su rol opositor se los impide. Se los impidió siempre. Miopía política, que le dicen.

Donda, que gustaba hacerse la “rebelde way” con carteles de “Vamos a portarnos mal” ¿A portarnos mal para qué? ¿Con qué objetivo? ¿Qué es portarse mal para Donda? ¿Criticar al gobierno que logró lo que los Porgresistas no pudieron? Con menos votos que el FIT y un porcentaje de representación ciudadana exiguo, Donda “arañó” su banca y ahora, que tiene que definir qué modelo de país quiere para el pueblo argentino, dice que vota en blanco. Quizá a la pequeña porción de gente a la que representa desde el congreso no le importen las medidas de gobierno y les alcance con tener algunos diputados que “se opongan” y no decidan.

Perón propuso en las elecciones que llevaron al gobierno a Arturo Illia en 1963 el voto en blanco. Pero las circunstancias eran bien distintas. El peronismo estaba proscrito y votar en blanco era una medida de protesta ante una democracia trunca.

Pero en situaciones como la que hoy atravesamos la definición es crucial. Dos modelos de país están en pugna y, burlonamente ¿Por egoísmo? ¿Por histerismo? quienes dicen representar al pueblo no quieren decidir ¿Qué valor tiene su representatividad, entonces? Ser opositor es más fácil que ser gobierno, pero cuando ese gobierno le concede al pueblo lo que la oposición no puede criticar porque es beneficioso para la gente, entonces la oposición se diluye. Y ahora se están diluyendo con un voto en blanco en la mano. 

0 comentarios: