Un nuevo 17 de octubre refresca la mística del movimiento nacional Justicialista. El movimiento PERONISTA es la corriente socio-política más importante y numerosa no marxista del mundo occidental.
Pasaron más de siete décadas de aquel maravilloso “aluvión zoológico” como los gorilas lo calificaron. Lo cierto es que ya nada sería igual para la Argentina y el continente todo. Nacía, rebelde y solidario, insolente y humanista, el movimiento del GENERAL. Ahora los humildes descamisados tendrían voz y participación activa en las conquistas de sus derechos postergados por un capitalismo salvaje.
Rostros curtidos por el sudor laborioso junto a las fraguas y tornos, mujeres aplicadas en las máquinas de numerosas textiles, y toda una compacta legión de obreros y empleados que reconocían en Juan Domingo Perón y EVITA a sus legítimos intérpretes, a sus líderes desde ese momento a la eternidad misma.
La década peronista de 1945 a 1955 colocó a la Nación entre las más desarrolladas del planeta, siendo pionera en los derechos laborales, compitiendo cabeza a cabeza con las potencias del mundo en perfeccionamiento tecnológico. En esos años en verdad “Los únicos privilegiados fueron los niños”. Luego, la traición a la patria se colocó, indignamente, uniforme militar y los fusiles con sus balas asesinas pretendieron matar los sueños. El peronismo entregó mártires y héroes al suelo patrio y la sangre derramada nos dio más fuerza que nunca. Por largos 17 años intentaron que el pueblo olvide a PERÓN. Pero el pueblo NO OLVIDA y el general un día VOVIÓ. Millones de hermanos fueron felices. El líder y su pueblo se encontraron en un abrazo insondable y sublime…
Hoy, sin miedo a equivocarnos, podemos decir que la MÍSTICA PERONISTA está intacta, y una vez más somos llamados a “sacar las papas del horno” antes que los liberales arruinen a la Nación y continúen sumergiendo a los trabajadores en la pobreza extrema.
En el presente la estrategia de los “poderosos” es clara: dividir al justicialismo en tres o cuatro fracciones distintas, enfrentadas entre sí. Hasta ahora parecen tener éxito en sus maniobras. Pero existe una conciencia popular colectiva que nos orientará por el sendero correcto. El PERONISMO unido no puede ser vencido.
Compañera EVITA, bandera y canción, ejemplo e himno de combate, el movimiento se nutre de tu FUERZA viva y presente para no perder el camino de la solidaridad y la hermandad.
En este nuevo 17 de octubre recordemos nuestras raíces, los sacrificios de tantos compañeros para que nuestro escudo permanezca en alto.
Mantengamos el orgullo de ser PERONISTAS, soldados de una causa que mucho tiene que dar a su pueblo aún.
Compañeros: ¡Muy feliz día de la lealtad!
Máximo Luppino
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